Pollo al limón
Este pollo es buenísimo, es ligero y gusta a chicos y grandes; a dieta o no a dieta, y lo mejor del caso es que si te sobra mucho jugo puedes guardarlo para hacer otras recetas. Te conviene prepararla temprano para que puedas dejar reposar el pollo en la marinada que harás con el limón y las especias.
Ingredientes:
4 pechugas de pollo deshuesadas y cortadas en mitades u 8 piezas de pollo de su preferencia.
1/2 tz de jugo de limón
1 tz de vino blanco
1/4 tz de aceite de oliva
1 cebolla pequeña picada
1 cdita perejil picado
1/2 cdita de estragón
1/2 cdita de tomillo
1/2 barrita de margarina (45 g)
1 tz de agua
sal y pimienta al gusto
Preparación:
Prepara una marinada combinando el aceite, jugo de limón, vino, perejil, tomillo y estragón. Quita la piel a las piezas de pollo y sazona con sal y pimienta. Báñalas con la marinada y deja reposar una o dos horas dentro del refri (debes voltear varias veces para que se cubran por todos lados)
En una sartén, acitrona la cebolla con una cucharada de aceite, hasta que empiece a dorar. Retira la cebolla y ponla en un refractario, como cama. En el mismo sartén, fríe las piezas de pollo en margarina. Cuando el pollo empiece a dorar, retiralo del fuego y ponlo encima de la cama de cebolla en el refractario. Combina la marinada que sobró con la taza de agua y cubre el pollo con esta «salsa». Hornea durante una hora a temperatura media (120 °C mas o menos). Tapa el refractario con papel aluminio o si tienes tapa del refractario mejor, así lo hornearás y evitarás que se reseque.
Cuando haya pasado una hora lo retiras del horno. Si quieres que sea realmente «light» combinalo con una ensalada de pepinos y jitomate, o elotes al vapor. Si no tienes que cuidar los carbohidratos que comes, entonces puedes servirlo con arroz blanco.