¡Ámate! Sólo como eres… (Parte 1)
La entrada pasada hablé de que debes hacer lo que te hace feliz, lo que concuerda con tu personalidad y forma de ser, para que sea una profesión que te satisfaga en todos los aspectos. Ahora leerás la primera parte de lo que debes hacer para poder amarte cómo eres y brillar. ¿Por qué? Si ya tengo mi trabajo feliz y no necesito nada más….
Bueno pues, si necesitas algo más, porque también debemos amarnos tal como somos porque si no, por más que tengamos el trabajo perfecto no podremos ser felices o tal vez no podamos incluso sobresalir como debemos en este que nos queda como “anillo al dedo.”
Ahora bien, ¿cómo es esto de amarnos solo como somos?Pues así tal cual, amarnos con nuestra nariz chueca, nuestro pelo lacio como baba, nuestros pies grandes, nuestras pecas, nuestros ojos “saltones”, encías “de caballo”, labios delgados o cualquier rasgo distintivo que tengamos. Amarnos con el peso que tenemos, con la ropa que vestimos, los zapatos que calzamos… Si hay algo de nuestro vestido que no nos gusta, pensemos que es algo temporal, no siempre utilizaremos esta ropa. Es muy importante que no escuchemos “a la loca de la azotea” porque nuestra cabeza a veces puede ser quien hace bullying a nuestro cuerpo, a nuestro corazón, a nuestra alma…
Si ya sé, seguro estás leyendo y pensando al mismo tiempo, ¿y ahora de que habla? Bueno pues justo de eso que sabes que es verdad y que no quieres reconocer. Esto que vas a leer aquí, es parte de mi programa Recetas para Sanar 24×7, pero considero que puedes empezar a hacer un trabajo en ti misma, para generar cambios en tu vida, aún si no trabajamos juntas, sobre todo porque quiero que sepas… ¿Cuántos pensamientos positivos de tu cuerpo, cara, vestido o de ti misma has tenido en este día? ¿Has notado que tal vez cuando te ves al espejo haces una mueca, o alguna cara? Verte en el espejo te produce una emoción…, puedes identificar ¿cuál es? Tal vez es alguna de las siguientes emociones:
Y seguramente sabes que es lo que causa que tengas este sentimiento hacia ti misma, pero hace mucho que “lo enterraste” y no has vuelto si quiera a pensar en eso de nuevo, tal vez no lo habías hecho sino hasta ahora que me estás leyendo, tal vez si lo habías hecho, y has preferido evitar enfrentarte a ti misma y abrir tu “caja de pandora”. Pues déjame decirte que ya es hora, es hora de salir de ese caparazón y emanar la luz que estás destinada a brillar.
Un gran hombre una vez dijo que estamos destinados a ser “Luz del Mundo y Sal de la Tierra” y en verdad es cierto, estamos destinados a eso, el chiste es que nos la creamos y le hagamos caso. Quieres saber cómo puedes liberarte de esas emociones ¿de una vez por todas? Y no necesitas un terapeuta ni miles de pesos invertidos en terapias para lograrlo, yo te presentaré una herramienta magnífica, liberadora y poderosísima para sanar. Lo primero que tienes que hacer es sentarte con un cuaderno e identificar qué emoción es la que sientes, después alrededor de esa emoción que has escrito escribe todo lo que te causa esa emoción. Como si fuera un diagrama de flujo o una “araña de ideas”.
Te dejo unas preguntas que pueden ayudarte a ir viendo que sucede contigo, te enseñaré a usar todo su contenido para liberarte.
¿Recuerdas algo que tus padres dijeron de ti que generaron esa emoción? ¿Tal vez en el colegio te molestaban? ¿Alguien dijo algo sobre un aspecto físico o mental? ¿Alguien te juzgó por algo? ¿Cómo me siento respecto de mi persona? ¿Estoy bien conmigo misma, me es fácil verme al espejo, debo trabajar mucho para agradarme a mí misma?, ¿Es seguro ser como soy? ¿Tengo miedo de ser exitosa?, ¿Hay algo que mi impide ser yo misma?
Que no te de miedo, escríbelo y llena hojas enteras para que lo tengas súper identificado y así, logres liberarte poco a poco de esas emociones que te tienen atorada. Hasta la próxima, mantén los ojos bien abiertos y los oídos agudos, la mente abierta y despierta para que no dejes pasar ni un solo pensamiento. Que no se te escape nada.
Un abrazo!